El mar, el mar

28 de julio de 2010



Spinoza, en su “Ética”, habla de un escritor español contemporáneo suyo que había perdido la memoria. Hasta tal punto, que no recordaba ser el autor de su propia obra. “(…) he oído contar de cierto poeta español que, atacado de una enfermedad, aunque curó de ella, quedó tan olvidado de su vida pasada que no creía fuesen suyas las piezas teatrales que había escrito…” (pág. 333).
Iris Murdoch también padeció una severa demencia que le impidió, en la última fase de su vida, saber que había sido escritora. En su madurez literaria, había escrito novelas hermosas y terribles, auténticas mareas narrativas que arrastran a sus personajes por abismos y los destrozan contra los acantilados de las pasiones humanas.
Hoy hablaré de “El mar, el mar” (He leído también “El príncipe negro” y “El sueño de Bruno”). Cuando lo leía, yo pensaba en el alto mar de las novelas de Enid Blyton.
Un mar pletórico también de mareas peligrosas y rocas que astillan los pobres botes de remos. El mar de Iris me parecía el mar de Los cinco hecho adulto. Un mar encrespado que no era sino el reflejo de las tormentosas relaciones de los humanos. En este caso, las que se establecen en torno a un famoso dramaturgo, Charles Arrowby, que se refugia una casa junto al mar con la intención de escribir sus memorias. Y a la vez que lo va haciendo, no sólo ajusta cuentas con su pasado, sino que éste revive con las numerosas visitas que va recibiendo en su casa marina. Un primer amor incluido.
Los sentimientos (en especial el sentimiento amoroso), son las poderosas corrientes que arrastran a los personajes de Iris hacia parajes desconocidos: los más insondables, los del alma humana. Pues, con ser terribles, podemos llegar a conocer los fondos marinos, pero no creo que sea tan fácil conocer, en la misma medida, el corazón de los humanos.

Spinoza, "Ética demostrada según el orden geométrico". Madrid, Alianza, 2007.

Iris Murdoch, “El mar, el mar”. Barcelona, Lumen, 2004.

6 comentarios:

antonio dijo...

Me gustó, muy interesante.
Tu no descansas de leer ni en vacaciones?
SALUDOS

HLO dijo...

Cuando no lea, estaré uno poco...muerta.

loquemeahorro dijo...

Me da vergüenza confesarlo, pero me lo regalaron hace años, y pensé que era un best seller o algo tipo "Barbara Cartland" por la persona que me lo compró.

No me lo leí y al final se fue de mi casa en algún expurgo.

HLO dijo...

Es que el nombre de flor despista...Pero es una buena escritora. Su esposo, el también escritor John Bayley, le dedica un emocionado homenaje en "Elegía a Iris", publicado por Alianza.

Noemí Pastor dijo...

Siempre he tenido a Murdoch en mente y nunca la he probado. ¿Por dónde empiezo?

HLO dijo...

Pues "El mar. el mar" tiene más de setecientas páginas. Quizá sea excesivo para empezar. "El sueño de Bruno" es la que menos me ha gustado; yo te recomendaría "El príncipe negro"; hay edición de bolsillo.